En la jornada de este viernes ha quedado abierta la obra de la Avenida de España, en su fase II, ejecutada por el Consorcio Turístico, en el tramo comprendido entre las avenidas de Tenerife y de Gran Canaria, en la urbanización turística de Playa del Inglés, cuyo presupuesto de licitación ha sido de 731.374,86€, adjudicada por 580.694,95€, financiado por el Patronato de Canarias, con Fondos de Desarrollo de Canarias 2016-2025, FDCAN, dentro del Programa Insular de Desarrollo Socio-económico de Gran Canaria. Los trabajos han sido ejecutados como obra civil por la empresa Lopesan, y en la instalación del alumbrado público por la contratista Imesapi.
Las obras de referencia tienen como misión la re-urbanización de esta céntrica avenida de la zona turística. Se ha realizado una transformación en profundidad mediante el rediseño completo de esta calle. Según sus promotores, estas obras de acondicionamiento han supuesto “un paso más en la mejora estética de la urbanización, como escenario de las actividades turísticas que sobre ella se desarrollan y posicionan a Maspalomas Costa Canaria, en San Bartolomé de Tirajana, como uno de los entornos urbanos más atractivos y cuidadosos con el visitante, convirtiendo la necesidad de pasear en un momento para disfrutar de nuestro buen clima y de todo la que nuestro sector hostelero y comercial puede ofrecer”.
Se han redimensionado anchos generales de calzadas y aceras, para un más amplio y mejor espacio para pasear, e incorporando mucho más verde, más vegetación y más arbolado allí donde puede proporcionar sombra al peatón, con incorporación de bancos y paradas de transporte público. Se mejoran también los pasos de peatones en los cruces proporcionando una mayor seguridad y limitación de la velocidad de los vehículos.
Se han renovado por completo todas las infraestructuras públicas urbanas existentes: redes de abastecimiento, redes de riego, líneas de saneamiento y alumbrado público, con la incorporación de una nueva red de recogida de aguas pluviales, que suelen ser torrenciales y causan problemas cuando discurren por superficie. El objetivo ha sido construir una calle con una configuración completamente nueva: bonita de pasear, accesible, confortable y segura al uso, manteniendo la funcionalidad del tráfico rodado.