Una decena de carretas y dieciséis agrupaciones folclóricas tanto locales como llegadas de varios puntos de la isla desfilaron ante la recientemente restaurada imagen de San Miguel, a quien ofrendaron con productos de la tierra y alimentos no perecederos.

Una Romería Ofrenda encabezada por la corporación municipal del Ayuntamiento de Valsequillo y que, como cada año, abrió el ganado ovino y caprino subiendo por la calle principal donde se agolpaba el público e incluso algunos vecinos y vecinas que se asomaron a sus viviendas, engalanadas para la ocasión. Las campanas sonaron al abrirse las puertas de la parroquia y la imagen de San Miguel, recientemente restaurada, salió al encuentro de los romeros y sus ofrendas.

Tras la corporación desfiló la carreta ganadora del año, en representación del municipio, que fue la que participó en la Romería Ofrenda de Teror. A partir de ahí, comenzó el desfile de carretas, las parrandas y la animación del resto un correcto uso de la vestimenta tradicional en sus diferentes versiones y diseños de todas las islas. Las escalinatas de la Plaza de San Miguel se fueron llenando poco a poco de productos procedentes de los barrios y los colectivos que se fueron sumando a la fiesta en un recorrido que fue una demostración de las costumbres canarias, con las carretas luciendo su decoración y sus ofrendas.

Tres horas de desfile con música canaria, coplas al santo patrón, bailes folclóricos, demostraciones del salto del pastor o del silbo canario y mucha devoción hicieron disfrutar a todos los asistentes de una gran fiesta canaria que se prolongó con encuentros de familias y amigos por las calles del casco histórico del municipio durante una noche canaria en la que actuaron varias parrandas y que continúo con una verbena.

Las fiestas continuarán a lo largo de la próxima semana con la Noche del verso Improvisado, la Fiesta Guateque de los años 60, la escenificación de la Suelta del Perro Maldito y la misa procesión y feria de ganado.