“Risco Caído ha puesto en el primer plano internacional a la arqueología canaria y su proclamación, como Patrimonio Mundial de la Humanidad por parte de la Unesco,debe servir para continuar investigando en el legado aborigen de Canarias así lo manifestó José de León, en el seminario sobre ‘Paisaje Aborigen de Gran Canaria’ que se impartió este martes en la XXVIII Universidad de Verano de Maspalomas.
El arqueólogo participó en este seminario, junto a los cronistas oficiales de Tejeda, Artenara, La Aldea y San Bartolomé de Tirajana, quienes destacaron el valor patrimonial de cada uno de los municipios que representan, y del experto Marcos Moreno.En la apertura del curso, participó la concejala de Cultura del Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana, Elena Espino, que destacó la importancia de la nominación de Risco Caído, pero también recordó “el importante patrimonio del sur”, “aún desconocido”, que está despertando el interés de las instituciones y de los expertos. “Queremos enfrentarnos al futuro conociendo nuestro pasado y poder dar a la historia del sur el protagonismo que siempre debió tener”.
En opinión de José de león, la nominación de Risco Caído pone en valor la cultura bereber o amazig que “salto a Canarias, donde permaneció aislada durante 1.000 años, y desarrolló toda una cultura de símbolos y lugares sagrados”. Este espacio siempre ha sido un gran desconocido, puesto que a lo largo del siglo XX, todas las investigaciones se centraron en la zona de la costa grancanaria, como fue el Agujero, Telde o La Aldea.
José de León ha invertido los cuatro últimos años en preparar el expediente para la nominación de Risco Caído y las Montañas Sagradas de Gran Canaria como paisaje patrimonio de la Humanidad. “La cueva de Risco Caído es un monumento único en Canarias, en perfecto estado de conservación, cuya nominación debe ayudar a fomentar la investigación de las culturas aborígenes de Canarias”, afirmó.
El valor de Risco Caído se basa en una cueva artificial con un nivel de perfección técnica, que alberga una cúpula de cinco metros, con un conducto artificial, por el que entra la luz del sol en el equinoccio. “Una luz que baña un friso de triángulos púbicos que destaca el papel relevante de la mujer en la cultura bereber. Todo apunta a que fue un templo, un marcador astronómico y, al mismo tiempo, un lugar relacionado con la fecundidad”, explicó el experto.
“Pero esta nominación no debe de quedar aquí, ahora hay que seguir trabajando, ya que dentro de dos años volverán los expertos de la Unesco para valorar lo que hacemos con el espacio y su conservación”, manifestó de León.
La XXVIII UVM está organizada por la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana y el Cabildo de Gran Canaria, en colaboración con otras instituciones y empresas, como Fundación Parque Científico Tecnológico, Rotary International, Asociación Chrysallis de Canarias, Casa África, Global y el grupo hotelero Gloria Thalasso&Hotels, entre otros.
Más información: www.universidadveranomaspalomas.org